Los raperos Kanye West y Jay Z son dos de las estrellas más importantes de la industria musical actual y por eso quieren estar cómodos en el hotel donde se hospedan, cuando van a dar un concierto. Kanye siempre solicita que en su habitación haya jarrones con una forma determinada para colocar flores y un tipo de altavoces que dejaron de fabricarse hace diez años, según informa el portal TMZ.
Otros de los requisitos del marido de Kim Kardashian es disponer de toallas negras, hilo dental de menta y cereales Golean de Kashi, además de contar con una selección de licores valorada en 3,200 dólares que debe incluir tres botellas de Paradis Hennessy.
Jay Z siempre pide que haya leche orgánica en sus giras para su hija de 3 años, Blue Ivy. Además, todas las habitaciones de hotel del artista deben ser a prueba de niños -con todas las esquinas, enchufes y bordes afilados debidamente cubiertos- y sin estatuas, lámparas ni objetos frágiles. Las suites en las que se aloja deben estar siempre a 21 grados y es imprescindible que cuenten siempre con tres velas con aroma de nardo maya, que cuestan 80 dólares cada una.
El personal de los hoteles donde se hospeda, Jay tiene prohibido pasar la aspiradora cerca de su habitación y pedirle entradas para sus conciertos para evitar "momentos bochornosos".
Aunque el rapero no necesita contar con un minibar tan bien surtido como el de Kanye, sí insiste en que le sirvan champán Ace of Spades, aunque no permite que le cobren por él ya que es propietario de la empresa.