Historias Trambolica$h: Karrine Steffans, la groupi que se acostó con los grandes del rap.
Tras un año de parón volvemos con la sección más irreverente de I Am Rap, esta vez con un poquito de goship.
Como en cualquier género musical, las groupis son un elemento habitual en el rap, ya sea en los conciertos, en los rodajes de videoclips o, incluso, en las grabaciones de los temas. Ni que decir tiene que en Estados Unidos esto se magnifica y está lejísimos de lo que sucede en España, de echo la imagen de la mujer en el rap yankee es bastante diferente a la que tenemos en nuestro país.
Pues bien, si hay una groupi por excelencia y orgullosa de serlo, esa es Karrine Steffans. La Messi de las groupis, quien presume de haberse acostado con muchísimos de vuestros raperos favoritos: Jay Z, DMX, P. Diddy, Ja Rule, Ice T, Dr. Dre, 50 Cent, Lil Wayne... Y no solo gente del rap, pues también anduvo liada con gigantes como Shaquille O'Neall, actores como Vin Diesel o cantantes como Fred Durst (Limp Bizkit).
Como cualquier historia dramática americana empieza con una infancia difícil, donde una muchacha de clase baja sufre los abusos de su padre, hasta que un día se harta y decide huir de su pequeños pueblo a una gran ciudad donde pueda escapar de una dura realidad que se la va comiendo por dentro. Decide marcharse a Phoenix, una ciudad en medio del desierto de Arizona en la que, ante su falta de experiencia laboral, consigue un empleo gracias a su despampanante físico: Striper en un club nocturno, aquí empieza todo. Entre los neones y los billetes volando, mientras las chicas bailan, Karrine llamará la atención de uno de los grandes de la vieja escuela. Ni más ni menos que Kool G Rap, con quien acabaría casándose y asentando más o menos la cabeza, ya que cuando le contará que está embarazada el rapero la echará de casa. Más tarde volvería, pero acabaría harta de los abusos y golpes de Kool G Rap y escaparía a Los Angeles.
En LA, seguiría frecuentando ambientes de rap, donde conocería a Ice T y empezaría una relación con él. Ice la metió en el mundillo dándole contactos y dinero, a cambio de sexo y rodar algunas películas (ya sabéis que tipo de películas), lo que la ayudó asentarse y a empezar a salir en videoclips de raperos de la ciudad y trabajar como modelo.
Estar en el mundillo del rap, ya fuese delante o detrás, le sirvió de mucho. Empezó a conocer bien la industria y como funcionaba. Nada es tan auténtico como parece y todo está bien controlado, según unas declaraciones suyas:
"No importa si quieres llevar un mensaje positivo en un disco, al final va a ser la discográfica quien decida la temática del álbum y, créeme, lo positivo en el rap no vende"... "A veces, incluso, se inventaban la vida de los artistas. Chicos que no eran ni tan malos ni tan ostentosos, pero claro había que darles una apariencia y personalidad que vendiese"
Ella ya llevaba dentro del rap unos años, saliendo en videoclips sobretodo, cuando conoció a Ja Rule justo cuando estaba en pleno beef con 50 Cent, con el que también se liaría. De Ja se recuerda sobre todo las fiestas y la vida que se pegaban, llena de lujos y excesos con las drogas. En una de aquellas grandes noches, Ja Rule sufrió una sobredosis quedando inconsciente en medio de la discoteca, tras varios intentos de reanimación volvió a ser consciente y ¿Que fue lo primero que hizo? Meterse un par de pastillas de éxtasis y seguir bebiendo.
Mientras salía con Ja Rule, en New York, empezó un lío con DMX del que dijo que era el rapero más real que ha conocido, tal y como actuaba frente a las cámaras era en el día a día. De hecho cuenta una anécdota muy curiosa:
"DMX me contó que porqué ladra a veces en sus canciones. Me quedé flipada, ya que me dijo que la policia mató a su perro a disparos en una redada y que, desde entonces, el alma de este se mezclo con la suya y a veces habla por si misma"
Volviendo al tema del éxtasis y las pastillas, Karrine desveló en su libro autobiográfico que la mayoría de raperos consumía habitualmente psicodélicos. Que, junto con otros músicos y deportistas de élite, compartían un camello común que se dedicaba a venderles lo mejor de lo mejor. Uno de estos músicos consumidores habituales y también liado con Karrine era Bobby Brown, que gracias a las declaraciones de la chica podemos entender muchas de las declaraciones extrañas que ha soltado en los últimos años (Lo de tener sexo con fantasmas y esas cosas). Según ella, mientras estaba con el cantante, estaba totalmente obsesionado con ser un miembro de Al Qaeda.
Otra de esas fiestas top, que muchos nos hemos imaginado si los videoclips se ajustan a la realidad, se produjo en la mansión de Diddy y, en este caso, incluso supera a las típicas fiestas de los rapers que hacen ver en los videoclips: Espectáculo de natación sincronizada, artistas de circo escupiendo fuego sobre zancos, comida y bebida por todos lados, algunos de los mejores dj's del momento pinchando... En fin, una ostentación sin precedentes, pero claro estamos hablando de la Nochevieja de 2001 y de Diddy.
Precisamente, la groupi por excelencia, habla también en su biografía de esta gran ostentación que hacen los raperos (recordemos aquellos años del bling bling, donde todo era exageradísimo y donde partió la pana la muchacha). La inmensa mayoría de los raperos que fardaban de lujos, coches, mansiones y grandes joyas eran unos fantasmas: Todo era alquilado y, ni siquiera eran ellos los que pagaban estos alquileres sino las discográficas. ¿Un ejemplo? Ja Rule, del que dice que, cuando vivían juntos, la mansión, los seis coches y las joyas que llevaba se las pagaba la discográfica. Al final, como la personalidad y la propia vida de los raperos, era una estrategía de marketing de las discográficas para potenciar y vender más.
"Ni 50 Cent, ni DMX, ni Jay Z. Ninguno de los raperos con los que estuve era un gangster. De echo eran tipos sensibles y con muchos problemas. Quizás Ice T era el que más cerca de esto estaba"
Fuera del mundillo del rap asegura que Shaquille O'Neal era muy posesivo, que le prohibió salir y quería que no viese a nadie más. El lado contrario era Vin Diesel, que según ella es uno de los mejores tipos a los que ha conocido (Se conocieron en el rodaje de la película Diablo).
Tras arrimarse a todos estos raperos y vivir una vida llena de fiestas y drogas, con 23 años, sufrió una sobredosis en medio de un restaurante en Los Angeles, decidió tranquilizarse, aunque siguió liada con algunos raperos. Hace unos años publicó su autobiografía, algo que causó un gran revuelo en el mundo del Hip Hop, sobe todo por la cantidad de detalles personales de grandes figuras de la música. A día de hoy se dedica al marujeo en televisión.