El nuevo disco de Eminem merece la pena escucharlo
Después de cuatro años, el artista de Detroit lanza su nuevo disco "Revival". El rapero que ha vendido la mayor cantidad de discos en la historia de rap se rodea de un séquito de estrellas, entre las que se cuentan Beyoncé, Alicia Keys, Ed Sheeran, etc...
Slim Shady, a sus 45 años, revela una nueva faceta de cantante comprometido políticamente y alarmado por el destino de su país un año después de la elección de Trump, a quien no duda en comparar con Hitler.
“Está tratando de dividirnos”, dice el rapero, representante de una clase desfavorecida que votó abrumadoramente por Trump. Pero, al final, “va a conseguir unirnos”, advierte.
En “Framed”, los aguijones van a la hija y consejera del presidente, arriesgándose a resucitar la controversia: conocido por sus palabras violentas contra el género femenino, Eminem se imagina que Ivanka Trump es encontrada muerta en el maletero de su auto.
Tras mantenerse mucho tiempo al margen de la política, el rapero salió de su bajo perfil en octubre para declamar incendiarios versos en los que acusó a Trump de racismo e incompetencia.
En el inesperado vídeo retransmitido durante la entrega de los premios BET Hip Hop, encapuchado y en un tono enfurecido, pide a continuación a sus fans que renieguen de Trump.
Conocido por su estilo crudo y mordaz, desconcierta con un primer tema, “Walk on water”, una balada apoyada casi completamente en un piano y acunada por la suave voz de Beyoncé.
“¿Será este otro paso en falso / para manchar cualquier herencia, amor o respeto que haya cosechado?”, se pregunta Eminem en la canción, haciendo una especie de balance de su recorrido y tratando de ahondar sobre sí mismo.
Al final del tema, el rapero vuelve a la cadencia más rítmica que se le conoce y evoca sarcásticamente el título “Stan”, su mayor éxito lanzado a principios de la década de 2000.
Con un flow acelerado y rítmico, Eminem vuelve a los territorios conocidos de los otros temas del álbum -19 en total- como “Believe” y “Chloraseptic”, en el que se hace acompañar por Phresher, un rapero emergente de la escena neoyorquina.