El lanzamiento de Onna-Bugueisha colocó a Las Ninyas del Corro como uno de los grupos de rap español con mayor proyección nacional el año pasado. El disco, su primer trabajo de larga duración, marcó el año por ser un auténtico toque de atención al panorama, distinguido por su energía, calidad de sonido y búsqueda de la perfección cuidando los detalles.
Este trabajo colocó a Laüra Bonsai, Felinna Vallejo y Esse Delgado en el punto de mira de todo el panorama español, afianzando su nombre y poniéndolo en la boca de todo el mundo.
Tras esto, 2022 ha supuesto un año de actividad intensa para el grupo, que ha firmado una gira muy intensa, que les ha familiarizado con los llenos y con las multitudes. Desde salas míticas como la Razmatazz, en la que hicieron un bolo histórico, hasta festivales míticos como el Monegros, donde compartieron cartel con artistas como Busta Rhymes, el año ha estado lleno de LNDC.
Les ha permitido aún así firmar un par de trabajos de tremenda calidad, como su colaboración para el álbum de Blasfem, Lesson 1, uno de los trabajos más fuertes del disco, y que sigue en la línea contundente de este grupazo.
Sin embargo, uno de los puntos de no retorno del año ha llegado con las dos fechas internacionales que tenía el grupo.
Dos fechas, dos retos
El rap español está familiarizado de sobra con los bolos internacionales. La larga relación que tiene con el panorama latinoamericano a través del idioma, ha dado pie a giras largas y muy exitosas. Este éxito se ha asomado al mundo anglófono, con más o menos éxito, en el cual algunos de nuestros artistas han probado suerte y han recogido algún fruto.
Sin embargo, los dos eventos planteados por LNDC se asomaron a dos escenas totalmente diferentes. La gira de las Ninyas recogía una primera fecha en Atenas, Grecia, territorio ignoto para el rap español, aunque un contexto cultural favorable ya que los griegos tienden a apreciar el castellano. La segunda fecha era en Toulusse, Francia, una localización más cercana, pero ello no implicaba que más fácil, aunque contaban con el apoyo de L'Entourloop, grupo clásico con el que compartían escenario.
Ambas fechas suponían un reto para cualquier artista nacional, y además en este caso, suponían también las dos primeras escapadas internacionales de las componentes de LNDC, con la presión y los nervios que eso supone.
Atenas tocó primero, el 19 de Noviembre, en el Arch club. Una auténtica locura. Una sala llena hasta reventar y con un público entregado que coreó las rimas de las barcelonesas y vibró al ritmo de Esse Delgado. Y aunque los nervios presentaron batalla, nada sobre el escenario parecía indicarlo. Las Ninyas ofrecieron un bolo sólido, sin errores, enérgico y muy visual.
Toulousse llegó poco después, el 24 de Noviembre en Le Bikini. repitiéndose el mismo patrón. Público entregado, sala abarrotada, y esta vez con la experiencia previa en mente, un bolo brutal y vibrante que fue una auténtica maravilla.
Y es que Las Ninyas del Corro y su trabajo Onna-Bugueisha no fallan. Son pura energía.
Un año que se acaba
Tras semejante doblete, en breves darán cierre a un año que ha sido brutal, y que se termina en Madrid el próximo 22 de Diciembre, en un show que seguramente supere todas las expectativas. Podéis encontrar toda la info aquí.
Por nuestra parte, que las seguimos desde hace tiempo y hemos disfrutado mucho con el crecimiento de este grupo en los últimos dos años, solo podemos maravillarnos de lo que suponen estas dos fechas internacionales.
Supone que Las Ninyas del Corro han hecho historia, no solo en nuestro país, si no también fuera de el. Han roto barreras y han presentado el rap nacional extramuros, y no solo eso. Si no que además, y sin lugar a dudas, los han conquistado.
