Llevamos siguiendo la carrera de Bejo desde hace años, cuando comenzó a destacar en el panorama debido a su estilo singular rapeando, muy personal, que le hacía desmarcarse de todo lo que podíamos encontrar en ese momento, salvo, tal vez, su propio grupo, Locoplaya.
Sin embargo, ha pasado el tiempo y nos hemos ido dando cuenta de que Bejo, es en sí mismo, de forma individual, un artista completísimo. Te contamos que nos ha generado esta opinión.
Desde el minuto cero, personalidad y carácter
Como decíamos, Bejo destaco desde muy pronto en el panorama por su estilo a la hora de rapear, algo bastante importante cuando eres rapero de profesión. Pero con el paso del tiempo (y cada vez más) nos hemos dado cuenta de que esto no es lo único que convierte a un rapero en un buen artista. El cuidado del detalle marca muchísimo la diferencia a día de hoy, y esto es algo en lo que Bejo se ha convertido en un auténtico experto.
Lo dejo entrever de forma temprana a través de un planteamiento muy personal de su estética y de como esta se trasladaba a su música a través de carátulas y especialmente videoclips, otro elemento que le hizo destacar sobre manera frente a otros artistas. Bejo no solo nos presentaba un universo musical personal, sino también un universo visual que se desmarcaba de las tendencias del momento. Si en España predominaba el clip básico, con el rapero estático en varias localizaciones, el canario le daba una vuelta mediante postproducción, y generaba un universo psicodélico que cautivaba a todo el mundo.
Esto lo vimos también trasladado a su arte, ya que su perfil como pintor, aunque en segundo plano, ha influido en parte en esta estética, especialmente cuando hablamos de carátulas.
La conjunción de estos elementos es lo que ha convertido al canario en uno de los grandísimos referentes del panorama nacional actual, siendo aclamado por compañeros y público.
Formula Juan Palomo: Yo me lo guiso, yo me lo como
Sin embargo, estos días el rapero canario nos sorprendía con un video en el que mostraba como había preparado todo el aspecto audiovisual en torno a su último trabajo, La vida en cholas. En él se le ve trabajando en su piso, manejando él solo todos los elementos para la realización de clip, video promocional y carátula. Un video que nos cogía por sorpresa precisamente porque aparece el canario trabajando él solo en todos estos aspectos, cuando lo normal es que se cuente con un equipo en el que cada integrante se encarga y especializa en una cosa.
Por la contra, en el video Bejo aparece haciendo contorsiones y diversas acciones que aportan una vez más ese cierto toque cómico y estrambótico que le acompaña y que ha conquistado al público de media España junto con su habilidad lírica.
Este video ha sido el elemento que ha acabado por cristalizar esta opinión que presentábamos, en el inicio, sobre el increíble carácter artístico de Bejo, que le permite ser autosuficiente en prácticamente todos los aspectos del desarrollo de su trabajo, hasta el punto de que el mismo ha mostrado en sus redes con este video.
Vemos también, una vez más, un aspecto positivo de las redes en la música, acercándonos a este proceso creativo tan único, y tan interesante, que no habríamos podido apreciar de cualquier otra forma, y que nos ha permitido a nosotros, al menos, valorar un poco más el arte y la habilidad del rapero canario que lleva un año espectacular con dos trabajos nuevos en su haber: La vida en cholas y el Tobogán, junto al madrileño Cráneo.