Delirio en Cat Ba: La ópera prima de Zamorano Beatz
Si eres de los que aún se emocionan con el boom bap de la vieja escuela, los versos crudos y la producción artesanal, Delirio en Cat Ba cumplirá tus expectativas. Esa necesidad que tenemos de un sonido under, menos limpio, pero que pone los pelos de punta. Es primer trabajo de largo formato de Zamorano Beatz, que llega como un puñetazo sonoro devolviendo el protagonismo al productor, poniéndolo en el lugar que merece en la escena.
Zamorano: El productor que movió cielo, tierra y underground
Nos parecería raro que no te suene el nombre de Zamorano, pero si te gusta el rap nacional, y especialmente el de la capital seguro que has escuchado lgo suyo. Desde su barrio en Madrid ha ido sembrando respeto en la escena, colaborando con figuras como ToteKing, Ill Pekeño, Soukin o Charlie. Pero “Delirio en Cat Ba” es distinto: no es solo una recopilación de colaboraciones, sino un álbum construido desde el alma y con la visión artística del productor como epicentro.
Zamorano no quería seguir la fórmula del single fácil ni del hit viral de dos semanas que predomina actualmente. Quería un disco de los de antes, un trabajo que pudieras escuchar entero, sin saltar pistas, y sentir que cada beat, cada verso y cada silencio estaba ahí por una razón. Que todo encajaba, que el trabajo conformaba un todo, un concepto.
Un viaje sonoro por lo más puro del hip-hop
Desde los primeros compases del álbum, se siente de qué va la película. Aquí no hay autotune brillante ni estribillos de TikTok. Hay bases oscuras, crudas y sin aditivos, con ese sabor clásico que remite al rap neoyorquino de los noventa, pero con un acento muy de aquí, siguiendo las normas que se han construido en el panorama nacional. Las colaboraciones no son casualidad: raperos como Faenna, Mashek, Sr Anderson, Xmaga o Hijos Bastardos dan vida a las instrumentales con barras cargadas de vivencias, reflexión y actitud.
Cada tema es una pieza del puzzle, y el conjunto suena como una obra coral, pero cohesionada, donde el egotrip se deja a un lado para construir algo más grande. Es, como dice el propio Zamorano, “un disco de familia”.
¿Y por qué Delirio en Cat Ba?
Como buen álbum conceptual, está plagado de detalles y no hay ningún cabo suelto. El título tiene historia, no es solo una frase bonita. Durante un viaje por Vietnam, Zamorano quedó atrapado por la atmósfera de Cat Ba, una isla que parece sacada de un sueño. Quiso usar una foto que tomó allí como portada del álbum. Cuando Sr Anderson escribió el verso “noches con kajbas, delirio en Cat Ba”, todo cobró sentido. Esa mezcla de calma e inquietud, de belleza y crudeza, es justo lo que transmite el disco.
El delirio, aquí no es confusión, es una especie de lucidez poética: un estado en el que la música y la vida se entrelazan sin filtros.
Mucho más que un disco: un manifiesto
“Delirio en Cat Ba”, es un golpe en la mesa. Es la prueba de que el productor no es solo un tipo en la sombra, sino el alma de muchos discos. Y que cuando se le da libertad creativa, puede construir algo tan potente como este álbum. Es además una reivindicación. Un manifiesto en pro de un sonido que parece que hemos apartado de determinados estamentos musicales, como por ejemplo un disco completo. Relegándolo al single y al streaming. Pero no. El underground está vivo y tiene mucho que decir.
Disponible ya en todas las plataformas, este proyecto está destinado a convertirse en una referencia del rap nacional. Si lo tuyo es el hip-hop con sustancia, ya sabes lo que tienes que hacer: sube el volumen y déjate llevar por el delirio.