Varios meses después de su salida llegó esta semana a mis oídos un álbum un tanto extraño, una colaboración entre un beatmaker alemán y un MC neoyorkino underground (Junclassic & Wun Two). Lo sé, a día de hoy quizás esto no suene muy atractivo o, al menos, eso es lo que pensé. Sin embargo la portada tenía cierto aspecto perturbador, insinuando más de lo que mostraba, así que decidí darle una escucha.
Su “Intro”, con ese aire retro ochentero, mensajes en el contestador y un bajo de un groove apabullante, no cambió mi escepticismo pero sí mi humor, relajándome, abriéndome los chacras que diría un yuppie. Aunque el loop soul repetitivo de “My Heart” no fuera nada del otro mundo, la cálida voz de Junclassic poco a poco fue introduciéndome en otro mundo mediante el remolino que llevó a Dorothy a Oz. Costó lo suyo, “More People” tampoco era la octava maravilla, con todo, el sample rayado sobre una pista que nos transmitía el ambiente decadente de los años veinte dio el punto de sopor ponzoñoso que necesitaba para perder el conocimiento.
Entonces comencé a escuchar los surcos del vinilo sobre mi piel. Y para “Before” ya flotaba en la nada cual fantasma que se desplaza a donde quiere, sintiendo cada vibración provocada por unas vocales del neoyorkino haciendo ‘oes’, burbujas que explotaban en otras burbujas como “Doomed Jun”. El MC soltaba rimas con un estilo que en nuestro país ha quedado sepultado por otras opciones incluso dentro del mismo rango sonoro –con excepciones, como ese gran MGM’s de Yako Muñoz.
Hipnotizado por su exuberante sobriedad, por su clasicismo arriesgado y su carácter transfronterizo, el viaje duró los tres cuartos de hora que dura este Better Than Fiction Too, aunque quizás fue algo más, hasta que el vinilo dejó de volver al inicio, encerrado en sus círculos. Música para quien se llena los pulmones de placer, ya sea con aire puro, humo, los encharca de alcohol o de imaginación.
