La pregunta es... ¿Seremos capaces de cansarnos algún día de este festival?
Es muy difícil que te salga mal un festi cuando cuentas con la playa, ubicación y cartel deseados. Aún así puede pasar... ¿A cuantos nos jodió el Al Rumbo hace unos años, eh chavales?
Su sexta edición ha estado a la altura de aquellas primeras que recordamos como las mejores, sobretodo la del año 2016 (Skrillex, Wiz Khalifa, Alpha Blondy...). Un cartel muy variado, repleto de grandes artistas y en el que, sin lugar a dudas, destacaban unos chavales llamados Black Eyed Peas, culpables de provocar el delirio de los miles de asistentes que abarrotaban el festival cantando sus grandes éxitos. Como decimos en Málaga "Estaba petadísimo", no cabía ni un alfiler para ver a los californianos, que no dudaron en atreverse con el español (A veces bien, otras no tanto). Apenas se notó la ausencia de Fergie y era el gran handicap al que se enfrentaban. Yo tuve la suerte de ver el concierto al lado de Zatu y Acción Sánchez quienes destacaron la puesta en escena del gruo cabeza de cartel.
Pero si tenemos que destacar un concierto en absoluto, es el que protagonizó el último día de festi, a las cuatro de la tarde, el jamaicano General Levy. Imaginaos la calufa, la reventaera de llevar tres días de festival y el horario (muchos se habían levantado a esa hora). Tenía todo en contra y sin embargo no vi, este año, un público más entregado: Todos bailando, pegando saltos, cantando pese a las enormes adversidades. Eso si, también os digo una cosa... A muchos nos mató, nos dejó sin energía!
Otro de los grandes destacados fue el concierto de SFDK. Aquí os hablo muy en serio, los he visto muchísimas veces y esta ha sido una de sus grandes actuaciones. Se salieron y todos los asistentes coincidían conmigo. Little Pepe puso la guinda al pastel saliendo por sorpresa para interpretar "Bajo el Mismo Sol" y hacer que las miles de voces de los weekers vibraran como nunca.
El concierto que fue la sorpresa fue un tal PJ Sin Suela, un tipo al que no conocíamos y que le salía flow por los poros. Un estilo rollo Calle 13 que finalizó estupendamente el primer día de festival.
Actuaciones como las de Rapsus, Nathy Peluso, o Ayax y Prok estuvieron más que a la altura. Sobretodo cuando los gemelos del Albaicín la liaron al cantar su temazo Polizzia, explicar lo que sucedió en aquel momento, como diría el típico capillita sevillano sería una cosa rollo "No se puede de explicar, es un sentimiento". Vamos flipante, se volvió loco el público, un público enorme en cuanto a número. Nosotros lo decimos siempre, estos chavales son ahora mismo el referente del rap español y los llenos en sus actuaciones nos dan la razón.
En el campo del reggae, como todos los años, tienen una organización perfecta en cuanto a la captación de artistas: The original Wailers, Malaka Youth, el ya citado General Levy... Aunque hacer coincidir a Morgan Heritage con Black Eyed Peas hizo que se sintiera mucho en el público de los primeros, quienes cuajaron un buen concierto pese a que se fue vaciando con la llegada del horario del grupo de Will.I.Am.
No podíamos no mencionar, aunque no tenga mucho que ver con nuestro género, la actuación de Ska - P. Fue uno de los conciertos más masivos que se recuerdan de la historia del festival y el público se rindió al grupo vallecano cantando sus grandes éxitos y consignas.
Esta edición ha sido la edición de los records, 150.000 personas han asistido al festival. Damos crédito de ello; el sábado no cabía un alfiler en el recinto, la zona de acampada se llenó y la playa también (incluso el día que estuvo nublado). No solo se ha convertido en un referente nacional, si no también europeo, lo digo personalmente ya que han venido amigos míos desde Italia, Portugal, Francia, Alemania... En definitiva, esperemos seguir disfrutando de este festival por muchos años, de momento ya se ha confirmado la próxima edición.
2019 ha sido un año caracterizado por la expansión, en cuanto a géneros musicales del festival. Han decidido apostar por el reggaeton y el trap dándole menos cabida a géneros como el drum & bass, metal o, incluso rap. Algo que no ha sentado muy bien a muchos de los asistentes de ediciones anteriores, quienes lo han manifestado constantemente en redes. El Weekend está trayendo a artistas que hacen más caja, pero obviamente no tan afines al público habitual que estaban cultivando durante estos años.
Ese probablemente sea el único "pero" que le podemos sacar al festival, sin embargo sigue siendo un festival plagado de buenos artistas y con una diversidad de géneros envidiable. Solo hay que ver el cartel de este año para darse cuenta de ello. Y es por esto, por lo que no podemos dejar, encarecidamente, de recomendar el festi.
Nos vemos el año que viene weekers!
